Javier Arenas aseguró que los primeros cien días de gobierno de los ayuntamientos tras los comicios del 22 de mayor suponen un "brote verde y el inicio de la confianza" y los ha resumido "austeridad, empleo y obsesión por apoyar a pymes y autónomos".
El presidente del PP andaluz señaló que los regidores locales "viven con la obsesión de pagar los sueldos, e incluso la luz, y están pensando muy poco en las elecciones". "Probablemente –agregó en referencia al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán- quien está pensando en elecciones es aquel que se niega a recibir a los alcaldes y, además, se dedica a perjudicar a los pueblos y ciudades de Andalucía porque su partido no ha ganado allí las elecciones". En este sentido, ha pedido a Griñán "lealtad institucional" y que reciba a todos los alcaldes "sean del color que sean"
Javier Arenas mostró su preocupación por la herencia que puede recibir el PP en el gobierno de la Junta de Andalucía porque "Griñán y la Junta de Andalucía llevan el mismo camino que Barreda en Castilla-La Mancha o Montilla en Cataluña". Por eso, consideró necesario "cuanto antes" un grupo de trabajo financiero "para que sepamos la verdad de las cuentas autonómicas".
En este sentido, afirmó que Barreda diseñó un plan de ajuste antes de las pasadas elecciones autonómicas y el Ministerio de Economía se lo paralizó, pero el que presentó Andalucía fue aceptado y "hoy se está recortando en sanidad, en educación, en guarderías y en los servicios esenciales básicos".
El presidente del PP andaluz aseguró que se trata de "un plan brutal de recortes sociales que ya está en marcha, que se puede demostrar documentalmente" y al que hay que añadir la reducción en 2011 del dinero que se destinan a estas materias en los presupuestos y aquellas partidas que se dejan sin ejecutar.